Como hace mucho que no saco a pasear mi pasión por las frutas y verduras, mi vocación profesional primera después de dibujar casas y ser trapecista con el circo de los muchachos, ahí voy.
Hoy me he encontrado la noticia de que ya han vuelto a la Tierra los 215 kilos de semillas germinadas que unos chinos pusieron en órbita hace 15 días para conseguir superfrutas y verduras mutantes gracias a su exposición a la radiación cósmica y la gravedad cero. Ole, ole, y ole los chinos, que cansados de construir misiles y hacer imitaciones, se lanzan a la carrera espacial cogiendo el rábano por las hojas.
Pongamos que es cierto que las radiaciones en el espacio provocan mutaciones en las frutas. ¿Qué ocurre entonces con los astronautas? ¿Alguien les cuenta los dedos cuando bajan de la nave?
Pongamos que los granos de arroz que han lanzado al espacio han mutado en genuinas supersemillas superastringentes y con superpoderes. ¿Podrá el campesino cantonés reproducir las condiciones de radiación e ingravidez si el mecanismo más sofisticado con el que cuenta es el mechero con el que enciende sus cigarrillos chinos?
Yo estoy muy a favor de la revolución verde, de los transgénicos y de la investigación en general, pero me muestro un poco escéptico en cuanto a la eficacia del turismo espacial de las semillas. También es verdad que algo debe haber de cierto cuando en la noticia que pone en duda la eficacia de la mutagenicidad, se habla literalmente de los “pimiento trees” de los chinos cósmicos.
Siguiendo un poco más la noticia, también caigo en la diferencia abismal que hay entre los extraños chinos y los cabales norteamericanos, que en alguna ocasión anterior en la que enviaron semillas al espacio, la NASA acabó repartiéndolas entre los niños de los colegios.
Pero no todo son quejas, ¿o acaso hay alguien que pudiera estar en contra de los melones de dos cabezas, de los tomates cherry que explotan con tanta fuerza que pueden reventarte las muelas, o de las manzanas con sabor a pato laqueado, o a pollo teriyaki?
Me fascina la agricultura, pero me vuelven más loco aún los chinos, especialmente los de pies grandes.
10 comments:
Pues no quiero ni pensar que pasará con el glutamato cuando lo envíen al espacio y cómo volverá. No, no quiero ni pensarlo, a mi que me gusta tanto el tomate raf y que tengo alergia a la comida china (mala) por culpa del más arriba mencionado glutamato.
Te advierto que en tu última frase habrá quien vea lo que NO quieres decir...
(¿Tomates cherry que explotan con tanta fuerza que pudien reventarte las muelas? Mmmmmm, ya estoy viendo la publicidad: 9 de cada 10 dentistas...)
esos cherry no tienen nada que ver con Neneh, no?
yo tb me habia quedado con el tema de los pimiento trees. habra tomate trees?
y por una vez, estoy de acuerdo con Troy: el comentario de los pies grandes rezuma aceite por todos tus poros.
¿Por una vez?
Qué fuerte la que tienen montada los vascuences...
Oye, Would, yo también estoy de acuerdo con ellos. Te lo he dicho mil veces: deja a Berlín! (aunque yo los pies no los tengo grandes pero otra cosa).
Esos chinos son los mismo que Dwalks dice que siempre están agachados y escupen?
Qué gustos tienes hijo, quédate en Europa, se está mejor...
si, no querras que sigamos aqui con la polemica sobre si Kate moss esta buena o no?
por cierto, yo digo que si.
Todavía me acuerdo de aquellos tiempos en los que me decíais que yo era el polemista...
dices que tu vida es aburrida estos días y hablas de los chinos, justo justo cuando dwalks está, precisamente, en china.
¿coincidencia? no lo creo
many greetings from dycneilandia.
Acabo de recordar algo que se dice de quienes tienen los pies grandes... Estáis fatal.
Malcom, ya he quitado lo de mi vida aburrida, que parecía propio de Calimero, aunque tienes razón que mi hastío quizá venga porque no tengo a Dwalks conmigo, y por eso misma haya hecho este viaje mental a China.
PD: Ya me he prometido no volver a escribir nada a partir de la media noche, que luego me queda redactado con las orejas y lleno de faltas de ortografía. Disculpad.
Estimado Sr. Would
Menos mal que no coincido con usted en lo de los chinos con pies grandes(?).Hubiera sido realmente preocupante. No se preocupe que su amigo no durará mucho en la china.
Que tenga un buen día.
Post a Comment