Que la música se liga íntimamente a los recuerdos es algo que todo el mundo sabe: el abecedario y la tabla de multiplicar se aprenden cantando.
Una canción, no necesariamente buena, escuchada en el momento adecuado, se puede mezclar con nuestros recuerdos de esa chica, ese libro, esa juerga, o incluso esa hostia con el coche, de manera que cada vez que la escuches, revivas esos momentos. Unos simples acordes llevan, en muchas ocasiones, a miradas cómplices llenas de entendimiento, una sonrisa, o una lágrima.
Todos tenemos nuestra canción predilecta, esa que por mucho que pase el tiempo nos sigue gustando invariablemente, y es seguro que alguien nos recuerda cada vez que la escucha. Probablemente porque sabe que es nuestro mantra, pero también porque se le haya torturado con ella. ¿Quién no le ha dicho a un amigo, “escucha esto, que te va a gustar”; “Pues... no”; “Que sí, escúchalo otra vez, que te tiene que gustar”?
Hace años tenía la costumbre de escoger una banda sonora para los libros que leía. Ya fuesen de 200 páginas o trilogías de 1000, durante toda esa lectura únicamente escuchaba el mismo disco, o dos del mismo autor, de manera que a la vez que daba al papel una nueva dimensión, en cada ocasión en que volvía a escuchar ese disco, revivía las emociones que me habían transmitido las páginas. Uña y carne se han convertido en mi cabeza Metallica y Stephen King; o los Söhne Mannheims y Jeff Long.
Q. Tarantino es el auténtico gurú de la dualidad historia-música. En Reservoir Dogs no solo utiliza la música para hacer bailar a un psicópata con una navaja, sino que se inventa un delirante diálogo en una cafetería quasi-Nighthawks para discutir qué quería decir Madonna con su Like a Virgin. Genial.
Para sacar nota, hay que leer 31 songs de Nick Hornby. Yo no me atrevo.
Pero, tratando de ir un poco más allá de lo evidente, ¿existe un antídoto para las canciones-HD? Es decir, ¿hay alguna manera de evitar que cuando escuchas una canción te vengan a la mente los recuerdos que tiene asociados, de borrar esa información? DBC Pierre (Vernon G. Little) propone someterse a un tratamiento, estilo La Naranja Mecánica, pero buscando el efecto inverso. Una canción escuchada hasta la saciedad, se despersonaliza, pierde su vínculo. Jamón jamón jamón monja monja mon.... ¿Tiene su sentido, no?
También es cierto que no hay que tratar de encontrarle sentido vital a todas las canciones que se escuchan. No, las canciones que suenan en la radio cuando has cortado con tu pareja y estás bien jodido, NO cuentan TU vida.
Mantra: Definition # 1: energy-based sounds
1 comment:
Difiero...
·Lo eres todo· de Luz Casal si hablaba de mi cuando una de mis primeras novias me dio la patada el 14 de febrero.
·El Camino de Regreso· de Ismael Serrano hablaba de mi cuando me vine a vivir a Barcelona,
Deje a una chica alucinante porque ya no bailaba un gusano en la tripa cuando sonaba el telefono y escuchaba "su" voz como en ·Lo echamos a suertes· de Ella Baila Sola.
·99% de cobertura del terreno nacional· de Ismael Serrano (otra vez) habló de lo destructiva que fue la relación con Mr. Donosti y realmente fue un mantra...
Seré como Leti y Felipe, que me escriben las canciones solo para que les de sentido yo???
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